Llega el Otoño y con él una nueva temporada reproductiva para muchas especies de peces…tropicales. En general, en Galicia los peces prefieren reproducirse en invierno, pues así las larvas aprovecharan los picos de abundancia de fitoplancton de la primavera y verano. En latitudes más tropicales, las estaciones reproductivas suelen tener mayor duración y ser más dispersas a lo largo del año. Es el caso del conocido como red fish o red drum, Sciaenops ocellatus.

El año pasado por estas mismas fechas aterrizábamos en Florida para colaborar en un proyecto que aplica telemetría acústica (como Artevigo con la maragota) para detectar zonas de puesta de esta y otras especies en el Golfo de Mexico. El «red drum» forma agregados reproductivos superficiales cercanos a la costa donde machos y hembras aseguran una nueva generación.
El «red drum» forma agregados reproductivos superficiales cercanos a la costa
Las agrupaciones son masivas, y atraen a otras especies que depredan sobre ellos, como tiburones toro o spinner sharks.

Pero la ciencia en Estados Unidos se hace a lo grande, como todo allí. Si aquí pensaríamos en intentar localizar estos agregados con una embarcación, experiencia y mucha suerte, allí esto último no entra en juego. Y es que si de lo que se trata es de localizar agregados superficiales, qué mejor que verlos desde el aire…¡volando una avioneta a baja altura!. En nuestro tercer día en Florida tenemos la oportunidad de participar en una de estas campañas para localizar los red fish, y con estos medios no tardamos en dar con el primer «manchurron» de peces. Estas cosas sin duda se ven mejor desde arriba – pensamos.

El equipo en la avioneta localiza los peces, y a su vez se coordina con dos embarcaciones que se dirigen hacia ellos. Una vez allí, los pescan, les implantan los emisores, y al agua de nuevo. La operación dura no más de 4 horas, la autonomía del avión. Es una jugada limpia y precisa, con poca probabilidad de fracaso. La operación se repite durante varias semanas hasta conseguir marcar varias decenas de peces y obtener una información muy valiosa sobre dónde se producen estos agregados, qué forma tienen y a qué velocidad se desplazan.

En el siguiente video intentamos ilustrar toda la secuencia del proceso antes descrito (una imagen vale más que mil palabras):
El redfish y mucho otros peces de su familia tiene una característica, y es que los machos son capaces de emitir sonidos con los músculos «sónicos». El sonido se asemeja al de un tambor, es un sonido típico de percusión, bastante fuerte y en una frecuencia perfectamente audible por el oído humano. El patrón de emisión de estos sonidos es de gran ayuda también en la investigación de estos peces y su actividad reproductiva. En reposo, los sonidos son espaciados y tranquilos, pero cuando se forman agregados reproductivos, la frecuencia e intensidad aumenta, y el ritmo varía. Conocido esto, es entendible que otra de las técnicas que nuestros colegas utilizan para detectar estos agregados sea simplemente sumergir un micrófono en el agua en varias estaciones predefinidas, y detectar presencia/ausencia de machos «tocando el tambor» a buen ritmo. Sin duda una técnica mucho más mundanal pero igual de útil.
El resultados de todo este esfuerzo son, no solo publicaciones de alto nivel científico, si no un conocimiento integral de la biología de las especies, integrando los patrones de movimiento con los patrones reproductivos más clásicos .
de verdad que son excelentes estos artículos y voy a estar pendiente de la demas publicacines que hagan….
exitos…
huyyy muy chevere esta nota que hacen ha y ademas unas espectaculares fotos ojala sigan haciendo estas publicacones
Seguro que seguiremos trabajando para lograr buenos posts y poder compartir con todos nuestras experiencias y conocimientos, que aunque escasos consideramos de gran interés (y son siempre de primera mano).
Pronto estarán disponibles nuevos posts con material de nuestros últimos viajes y campañas.
Muchas gracias por seguirnos.
Saludos del equipo.
… es que reconozco que a veces uno se pone bastante tiquismiquis y repelente con estas cosas… 😉
Ok, gracias por la info.
La gran mayoría eran spinner. Toros solo aparecían de vez en cuando, junto con algun martillo pequeño.
Un saludo
je je, se pueden hasta contar… muy chulo
Son dos especies diferentes, Carcharias taurus y Carcharhinus brevipinna, que en esa foto son imposibles de distinguir, claro, por eso os preguntaba, por si pudisteis verlos allí.
Impresionante. Igualmente, mucha envidia.
¿Qué tiburones son los de la foto? ¿Os acordáis? ¿Toros o picudos?
No lo sabemos seguro; pero parecen tiburones toro o spinner sharks.
Excelente trabajo,como os envidio.
Gracias Fran, la verdad es que nos podemos considerar unos privilegiados. Nos alegra que te guste el contenido del blog.
Saludos, el equipo de Ecología Azul.