
De nuevo este año nos surgió la oportunidad de participar en una expedición científica organizada por nuestros compañeros portugueses de la EMAM (Estructura de Missao para os Assuntos do Mar). El destino este año fue variado, incluyendo las islas Desertas y Porto Santo en Madeira, y las Formigas en Azores. Como las tesis consumen mucho tiempo, nuestra presencia se redujo este año a la etapa azoriana.

Nuevamente el buque nodriza y base de operaciones fue el antiguo «bacalloeiro» Creoula, en el cual embarcamos el 14 de Julio en Ponta Delgada, reencontrándonos con muchos colegas del año anterior.
Los ilheus das Formigas son una pequeña coordillera submarina que aflora a superficie, y que se integra en un complejo mayor de montañas submarinas conformado por las propia plataforma de las Formigas, el Arrecife Intermedio y el Banco de Dollabarat. Esta plataforma submarina en su conjunto se extiende por un área de varios kilómetros cuadrados entre la Isla de Santa Maria y la de San Miguel, con un profundidad de en torno a 20-60 m, aunque en el caso de las Formigas las rocas llegan a aflorar hasta una elevación de unos 11 m, donde en su día se contruyó un pequeño faro. Por supuestoo están totalmente deshabitadas.

La llegada al mini archipiélago ocurrió el día 15 de Julio, donde aprovechamos para hacer las primeras inmersiones. Se trata de un ambiente pelágico total, donde los más experimentados y afortunados relatan encuentros con mantas e incluso marrajos. Nosotros no tuvimos tanta suerte, pero la topografía del fondo es espectacular, y la claridad del agua casi ilimitada. Son buceos en el límite de la descompresión, sobre todo para ver una de las especies más emblemáticas de esta zona, el coral negro, que empieza a aparecer en torno a los 30 m. Llama la atención también la presencia de Laminaria ochroleuca a partir de profundidades de 40-45 m, siendo el único lugar donde esta alga crece en las Azores.

La suerte nos dejó de lado al día siguiente con un vendabal de norte que dejaba unas olas de un par de metros lo que complicaban la maniobra de carga y descarga de zodiacs, con lo cual se tomó rumbo a Santa María, el plan B. Sin embargo, la calidad de las inmersiones se mantuvo, sobre todo en la conocida Pedrinha, en lo que fue una de las mejores inmersiones de los últimos tiempo con una visibilidad de 40 metros. De nuevo, sin suerte en avistamientos de grandes peces, pero afortunados con el paisaje submarino de grandes desplomes y grutas. Santa María tiene ganada su fama como uno de los mejores detinos de buceo de las Azores.

Agradecemos desde aquí la invitación de la EMAM un año más para participar en esta campaña.
muy chevere este articulo es bueno enterarse de cosas que solo nos dan alegría y que sirven para mirar lo maravillosa del mundo.
¡Gracias! ¡¡Te prometo que en los peces no solemos fallar tanto!!
Un saludo
Siento hacer el papel de mosca cojonera tan a menudo XDDDD , pero acabo de darme cuenta justo ahora por el rabillo del ojo de que el género también lo tienes mal escrito
Antipathes
Mis disculpas y bonitas fotos
¡Gracias pvaldes!
Es bueno saber que nos sigue gente rigurosa, ya está corregido.
Un abrazo
wollastoni, te sobra una n