Por Rafael Bañón (IIM-CSIC) e Ignacio Bárbara (Universidad de A Coruña)
Los hábitos alimenticios de los peces son muy diversos. Nos encontramos con peces carnívoros, herbívoros, omnívoros, detritívoros y filtradores. Los herbívoros obtienen sus nutrientes a partir de alimentos de origen vegetal, ya sean plantas (fanerógamas marinas) o algas. Son pocas las especies que se pueden considerar como herbívoros estrictos, ya que muchas especies compaginan ambos tipos, siguiendo una alimentación mixta: herbívora/carnívora.
Los peces herbívoros pueden ejercer un efecto significativo en las poblaciones de macroalgas también en regiones templadas.
Los peces herbívoros tienen un efecto significativo sobre la población de macroalgas, no solo en zonas tropicales, sino también en templado-cálidas (Yatsuya et al. 2015). El calentamiento global y las corrientes que fluyen hacia los polos están creando zonas cálidas en los océanos de todo el mundo, lo que permite la expansión de especies tropicales y el aumento de sus tasas de ingestión en las zonas templadas (Vergés et al., 2014). Por ejemplo, en la costa vecina portuguesa, Franco y colaboradores (2015) encontraron 45 veces más peces herbívoros en una región «cálida» que en una región «fría».

En Galicia la especie nativa estrictamente herbívora es la saboga Sarpa salpa, que muestra síntomas de un incremento notable de su biomasa a lo largo de las últimas décadas en nuestras costas, pasando de las 8 t descargadas en lonjas gallegas en 1997 hasta las 700 t alcanzadas en 2015, que supone el máximo de la serie histórica.
En Galicia la especie nativa estrictamente herbívora es la Sarpa salpa.
Otras 2 especies estrictamente herbívoras detectadas en los últimos años en aguas de Galicia son las chopas blancas (género Kyphosus), en concreto Kyphosus sectatrix y Kyphosus vaigiensis (Bañón et al., 2017).

Ambas especies son tropicales y su presencia ha ido aumentando tanto en el Mediterráneo como en el Atlántico europeo debido presumiblemente al cambio climático y calentamiento de las aguas.
Otras especies estrictamente herbívoras detectadas en los últimos años en aguas de Galicia son Kyphosus sectatrix y Kyphosus vaigiensis.
Las especies de Kyphosus son muy voraces. En el oeste de Japón, donde este género es más común, se ha observado que el número de ejemplares capturados disminuye a medida que la temperatura del agua desciende (Yamaguchi et al. 2010). En el sureste de Australia, Kyphosus sydneyanus ha ampliado su rango de distribución y abundancia en respuesta al cambio climático (Last et al., 2011).
¿Qué sucede en Galicia?
En los últimos años, se ha constatado la disminución de la abundancia de algas templado-frías en Galicia y resto del litoral Atlántico Ibérico, llegando algunas especies a desaparecer de numerosas localidades (Martínez et al., 2015).

Si bien todo apunta a que se trata de los primeros efectos regionales del cambio climático, desconocemos el papel que puedan tener los peces herbívoros en esta disminución. Al menos desde 2009 se han podido observar las huellas del ramoneo que los peces herbívoros dejan en las algas laminares, tanto pardas (Laminaria spp., Phyllariopsis spp., Saccorhiza polyschides), como rojas (Calliblepharis ciliata, Dilsea carnosa, Schizymenia dubyi), ya sean en su parte lateral o en su parte media.

En Japón, en experimentos en tanques, Kiriyama y colaboradores (2001) identifican la especie causante de las marcas por la forma y el tamaño de los mordiscos en las láminas. Los mismos autores identifican las marcas circulares en el medio de las láminas como «pecking behavior» o comportamiento de picoteo, similares a las marcas encontradas en nuestras costas.

Se desconoce el papel de los peces hervíboros en la disminución de la abundancia de algas templado-frías en Galicia y resto del litoral Atlántico Ibérico.
El aumento de peces herbívoros puede tener un efecto sinérgico, potenciando los efectos directos observados del cambio climático sobre la disminución de algas. Tanto el aumento de la saboga, nativa, como la presencia cada vez más habitual de ejemplares de Kyphosus pueden influir en esta disminución. Sería recomendable la realización de estudios e investigaciones específicas con el fin de conocer los efectos que tienen los peces herbívoros sobre el ecosistema marinos de Galicia.
Interesante artigo. Eu na ria de Pontevedra tamén observei esta depredación de algas pardas por salpas, pero non creo que sea algo determinante. Aquí, despois de desaparecer dous anos, os grandes bosques de algas pardas ou golfeiros voltaron aparecer sen máis e agora son abundantes. Pola contra, na illa de Ons desapareceron case totalmente da cara leste e non voltaron aparecer.
A ver se nos sorprende a administración e empeza unha investigación profunda sobre este problema.
Muy buen artículo. Yo mismo presencié hace años, durante una jornada de pesca submarina, como un gran banco de salpas acababa en pocos minutos con la laminaria que cubría unas rocas en la zona de Pedras Negras – O Grove.